El Trujamán

Historia

Los caminos de la traducción: el caso de Antonio Peñaranda

Por Alberto Rivas Yanes
16/07/2025

Entre los traductores españoles que comenzaron a trabajar en las secciones de traducción de los organismos internacionales en los años cincuenta y sesenta cabe definir un grupo con determinados rasgos diferenciales respecto a otros grupos (como el de los exiliados de la Guerra Civil o el de los exiliados o represaliados del franquismo): en España trabajaban como funcionarios del Estado o en el ámbito de la Administración y en su veintena o su treintena iniciaron una trayectoria de traductores internacionales. Todos ellos se enfrentaron al dilema de continuar trabajando en España u optar por la vía del funcionariado internacional. Algunos de ellos ejercieron el oficio en puestos permanentes durante unos años y después volvieron a instalarse en el país, pero continuaron trabajando como traductores temporeros; es el caso de Miguel Sáenz. Otros (como mi padre, Manuel Rivas Corral) compaginaron desde el principio un empleo público estatal con la temporería. Y, por último, otros (por ejemplo, Justo Peral de Acosta) ejercieron el resto de su carrera profesional en organismos internacionales. Este es también el caso de Antonio Peñaranda López, que falleció el Día del Libro de este año.

Antonio Peñaranda (Madrid, 1940-Ginebra, 2025), hijo de guardia civil y nieto de agricultores, estudió Derecho y muy joven aprendió el inglés, el francés y el ruso. Se acercó a esta última lengua cuando, a los veintiún años, sufrió una grave lesión pulmonar que lo obligó a pasar más de dos años internado en un sanatorio. Gran aficionado al ajedrez, se compró una gramática del ruso en francés para poder leer un libro del ajedrecista ruso Chigorin y, con la ayuda de su compañero en el sanatorio Juan de Mingo, «niño de Rusia», terminó dominando la lengua y hablándola con fluidez. Tras obtener su licenciatura, ofreció sus servicios al Ministerio de Información, en el que lo recibió personalmente Manuel Fraga y donde obtuvo inmediatamente un contrato de trabajo como kremlinólogo y especialista en los países de la esfera comunista. Además, entre 1964 y 1966 trabajó como profesor de Derecho Internacional Público y Relaciones Internacionales (materias sobre las que publicó varios artículos, así como reseñas de obras rusas) de la Universidad de Madrid, en la que se doctoró en 1968 con una tesis titulada El derecho internacional soviético y el problema colonial.

En ese mismo año aprobó un examen de la OMS para traductores temporeros y trabajó como tal en Ginebra durante tres años. Ante la negativa ministerial a su petición de alternar períodos de trabajo en Madrid y en Ginebra, se afincó en esta ciudad en 1971, ya como traductor fijo de la UIT, donde fue revisor y posteriormente jefe de la sección española; se jubiló en 2000. En sus años de traductor continuó publicando artículos y libros sobre derecho internacional. Una vez jubilado siguió participando en numerosos coloquios y encuentros de traducción y a partir de 2003 colaboró durante un par de meses al año con el Servicio de Traducción de las Naciones Unidas en Ginebra como formador, impartiendo cursos de traducción en el ámbito penal y de los derechos humanos para los traductores noveles y orientando a estos de manera individual. Fruto de esta labor docente fue la publicación en 2011 de un volumen sobre el proceso penal comparado en España, Francia, Inglaterra y Estados Unidos que incluye útiles glosarios. El libro tuvo una notable repercusión en el mundo de la traducción y en 2015 Peñaranda publicó una segunda edición ampliada en la que incorporó la descripción del sistema ruso, así como un glosario de términos del procedimiento penal de algunos países hispánicos. En la fase final de su vida se consagró a otra de sus pasiones, la historia medieval de España (para lo que aprendió a leer el árabe y el alemán). El resultado de esta dedicación es un libro inédito sobre los conflictos bélicos y la diplomacia en la España del siglo xi. Además, escribió unas memorias, destinadas a sus descendientes, en las que, entre otras cosas, evoca sus recuerdos de los traductores del exilio que trabajaron con él.1

  • (1) Referencias: La persistente dedicación de Antonio Peñaranda a la reflexión sobre cuestiones de derecho internacional en sus años de ejercicio profesional de la traducción se refleja en los libros La función de la efectividad en el derecho internacional (Madrid, CSIC, 1973) y La costumbre en el derecho internacional (Madrid, Editorial de la Universidad Complutense, 1988). Su legado para los traductores jurídicos e institucionales se plasma en el libro Proceso penal comparado (España, Francia, Inglaterra, Estados Unidos, Rusia) (Granada, Comares, 2015), cuya primera edición (Granada, Comares, 2011) se tituló El proceso penal en España, Francia, Inglaterra y Estados Unidos: descripción y terminología. Algunos datos del presente artículo proceden de sendas conversaciones telefónicas que el autor tuvo el honor de mantener con Antonio Peñaranda el 6 de marzo y el 11 de abril de 2023. volver

(artículo completo en el trujamán)

Léxico

Se parecen, se parecen..., pero no son lo mismo (25): «gown» y «coat»

Por Fernando A. Navarro
09/07/2025

Cuando uno empieza a estudiar una lengua extranjera —pongamos el inglés—, es frecuente preguntar «¿cómo se dice tal palabra en inglés?» o «¿qué significa tal otra en español?», como si cada vocablo de nuestra lengua tuviera una correspondencia biunívoca con otro vocablo concreto en la nueva lengua que estamos aprendiendo...
Profesión

Tríptico sobre trabajo editorial (2). Cortijo cultural (purgatorio)

Por Javier Roma
02/07/2025

Al señorito se le rinde pleitesía, se les enseña a los jornaleros. Ante el patrón hay que mostrar disciplina al menos desde la entrada hasta la salida del puesto de trabajo, se les inculca a los obreros industriales. Los trabajadores culturales por cuenta propia tienen bien aprendido que ante el director de una empresa o ante el encargado de turno se pone buena cara, se enarbola la versatilidad y se derrocha entusiasmo...
Historia

Un gigante solitario

Por Manu López Gaseni
25/06/2025

Joanes Leizarraga es el primero de una larga tradición de traductores al euskera que, por diversas razones que ya expliqué en su día, han pasado a engrosar la historia de la literatura vasca...
Historia

Xuanzang y el rey mono

Por Lucas Martí Domken
18/06/2025

La traducción es un oficio discreto, y la mayoría de sus héroes nunca salen de la espesa sombra proyectada por el autor, es decir, no ven la luz pública (a veces literalmente, cuando su despacho se convierte en la continuación de la celda monástica)...
Lenguas

La flauta de Pan

Por Teresa Solana
11/06/2025

Uno de los retos de traducir novelas que fueron escritas hace casi cien años es qué hacer con las referencias culturales que manejan los autores, unas referencias que seguramente resultaban perfectamente comprensibles para los lectores de su tiempo porque formaban parte de su acervo cultural, pero que, hoy en día, muchos lectores no «pillan» (sobre todo los más jóvenes) porque los referentes han cambiado...

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies