Lunes, 15 de julio de 2024.
Espacios de dominación, espacios de resistencia. Literatura y traducción desde una sociología crítica, Fruela Fernández, Frankfurt am Main, Peter Lang, 2014, 117 páginas.
Sandra Mora López
Al calor de la fantástica intervención de Gisèle Sapiro en el reciente congreso Traducción y Sostenibilidad Cultural (USAL, abril de 2024), titulada Translating the Humanities and Social Sciences: Issues and Challenges, no está de más recuperar un texto, no tan reciente, que se esforzó por hilar un pensamiento y una práctica asentados, precisos y rigurosos sobre traducción y literatura, desde una perspectiva crítica y social.
Fruela Fernández es poeta, novelista y, para fortuna de esta reseña, ensayista. No porque destaque más en esta labor que en las otras, sino porque el texto que nos ocupa hoy es una breve y condensada muestra de todo lo que una sociología crítica puede hacer ―y está haciendo― por arrojar algo de luz sobre las prácticas que componen el ámbito de la traducción literaria, que no por asumidas y aceptadas son menos merecedoras de análisis, crítica y, en su debido caso, desmantelamiento. Publicado en 2014 en la prestigiosa editorial académica Peter Lang, este texto tiene vocación de manual, de obra que sirva y que genere un desarrollo tras de sí, en forma de estudios que tomen el testigo de sus líneas temáticas, propuestas metodológicas y, en general, de su espíritu crítico, con la creación y difusión de la literatura, más concretamente en el ámbito español.
El texto, que es breve, se abre con una introducción cuyo muy sugerente título, «El análisis como defensa», ya sienta las bases de la propuesta y da pie a esa idea de concebir el libro como un manual que sirve para crear algo nuevo y práctico, que nos despabile un poco del ensimismamiento al que nos llevan los análisis amputados de su dimensión social y política. El instrumento para llevar a cabo esta crítica no es otro que el aparataje teórico de la sociología de Pierre Bourdieu, consolidado por décadas de teoría y práctica, susceptible además, con la debida cautela, de proponer formas de mapear el territorio de la traducción literaria en España.
Seis apartados siguen a la introducción, cada uno destinado a dar cuenta de una cuestión relevante para el proceso de adentrarse en este análisis sociológico del mundo de la traducción editorial. En el primero, titulado «Mapas, campos, sistemas: la traducción literaria en un marco sociológico», se sientan las bases para adaptar las herramientas de descripción, análisis y explicación que proporciona el estructuralismo constructivista del archiconocido Pierre Bourdieu en el contexto de la traducción literaria y sus muy diversas prácticas. Poniéndonos en guardia contra las adaptaciones y aplicaciones desinformadas de los conceptos bourdieusianos, Fernández desgrana, en líneas generales, qué puede hacer la caja de herramientas conceptuales de la sociología por los Estudios de Traducción, en particular como complemento a las teorías sistémicas de la cultura, como la también conocida Teoría de los Polisistemas.
A continuación, es el momento de poner en práctica estos conceptos analizando algunas ideas típicas del pensamiento literario, como la literatura universal, el concepto del creador, el del gusto, y la forma en que se afianza la autoridad en el campo literario, sin olvidar los complejos choques que se producen en los procesos de recepción. Resultan de especial interés los capítulos centrales, dedicados a los tipos de capital cultural en el intercambio literario y a la forma en que lo estructuran. El ejemplo del Borges pseudotraductor, dotando de aura (perdón, Walter), o más bien de expectativas de rédito económico, a textos de traductores anónimos o a producción propia de baja calidad, sirve de base para analizar la construcción de la idea del autor-creador en el ámbito de la traducción editorial.
Muy especialmente en este contexto, se vuelve clave la cuestión del habitus de género como forma de abordar las problemáticas de la feminización de la profesión, en particular en aquellos géneros textuales con menor capital cultural y mayor rendimiento comercial ―aunque no para ellas―, así como la reproducción de las condiciones de exclusión de las mujeres en premios y otros espacios generadores de prestigio literario y, por ende, reproductores del mayor capital cultural, y económico en determinados casos. El habitus de género proporciona, pues, una forma de nombrar, caracterizar y denunciar las prácticas que promueven la doble invisibilidad que pesa sobre las traductoras, que, no olvidemos, son la mayoría y que garantizan la supervivencia y la calidad en el sector.
A continuación, en «Expresiones de lugar: discurso crítico y poder simbólico», se desarrolla la cuestión de la presentación personal en el campo literario-traductor y cómo se genera discursivamente la autoridad, por ejemplo, a través de la prensa y de la difusión de la autoimagen, en relación con el resto de conceptos ya mencionados. Por último, en el capítulo seis, «La recepción como apropiación: el enfrentamiento por los conceptos», se analiza el juicio estético como acto ideológico, a través de ejemplos que resultan muy relevantes en el contexto de posicionar los textos en un mercado capitalista espectacularizado, en el que generar conversación-visibilidad-contenido acerca de un texto literario es bastante más importante que la pertinencia de esa conversación.
En resumen, Espacios de dominación, espacios de resistencia es un libro, por una parte, de obligada lectura para quienes deseen informarse más sobre las prácticas sociales que articulan la profesión de la traducción editorial, y, por otra, un manual de consulta para quienes deseen armar su propio discurso acerca de estas cuestiones, con precisión y rigor, y dar cuenta de todo aquello que queda por sacar a la luz sobre una profesión considerada invisible y sobre unas profesionales que lo son por partida doble.
Para terminar, y con la intención de que la lectura de este volumen abra la puerta a conocer (y reconocer) más el trabajo de Fruela Fernández, se enlazan debajo algunos artículos relacionados con los temas que toca Espacios de dominación…, así como la contribución del autor a VASOS COMUNICANTES en 2018 y, como muestra de su trabajo más reciente, otro artículo donde analiza la politización del tiempo en el contexto de la cuenca minera asturiana a través de la hauntologie, las propuestas fisherianas y la tradición rebelde de E. P. Thompson.
Fernández, F. (2011). «La sociología crítica y los estudios de traducción: premisas y posibilidades de un enfoque interdisciplinar». Sendebar, 22, 21-41. https://ddd.uab.cat/pub/quaderns/11385790n18/11385790n18p187.pdf
Fernández, F. (2011). «Las condiciones sociales del juicio. Aportaciones al estudio de la recepción crítica de literatura traducida». Quaderns: Revista de traducció, 18, 187-198. Disponible en: https://ddd.uab.cat/pub/quaderns/11385790n18/11385790n18p187.pdf
Fernández, F. (2014). «Assessing masculine domination in a cultural field: women translators and book translation awards in Spain (1984-2012)». The Translator: studies in intercultural communication, 20, 2, 162-177.
Fernández, F. (2017). «De la profesionalización a la invisibilidad: las mujeres en el sector de la traducción editorial». TRANS: Revista De Traductología, 16, 49-64. https://doi.org/10.24310/TRANS.2012.v0i16.3211.
Fernández, F. (2018). «Por una traducción expandida: algunos apuntes sobre literatura, política y presente». VASOS COMUNICANTES, 48-49, 81-84. Disponible en: https://vasoscomunicantes.ace-traductores.org/wp-content/uploads/2019/09/Vasos48-49Baja.pdf
Fernández, F. (2022). «Contra la nostalgia: Tradición rebelde, hauntología y politización del tiempo». Pensamiento al margen, 15, Ateneo Cantonal de Estudios Políticos (ACEP). http://hdl.handle.net/10201/117692.
Sandra Mora traduce del francés, del inglés y del italiano y actualmente es investigadora en formación en la Universidad Autónoma de Madrid, donde estudia la traducción y autotraducción de discursos metafóricos al inglés y al español en tres novelas de Samuel Beckett. También se ha formado como traductora audiovisual y ha trabajado en proyección de subtítulos y traducción para la Filmoteca Española.