Propuestas de ACE Traductores para hacer frente a la COVID-19

Lunes 20 de abril 2020.

En respuesta a la voluntad de diálogo y al llamamiento del ministro de Cultura para que los diferentes sectores culturales propongan soluciones con las que hacer frente a la situación actual, la junta de ACE Traductores ha hecho llegar a la Dirección General del Libro un escrito en el que se sugieren medidas a corto y medio plazo pensadas para paliar los efectos de la crisis no solo entre los profesionales de la traducción editorial, sino en el ámbito del libro en general.

A continuación, presentamos la lista de propuestas:

  1. Ayudas públicas
  • Ampliación y revisión de la política de subvenciones a la edición de obras, condicionadas, en su caso, a unas tarifas de traducción dignas negociadas colectivamente, tal como establece la Directiva UE 2019/790 sobre los Derechos de autor y derechos afines.
  • Abono de los honorarios, becas u otros pagos correspondientes a actividades programadas por las administraciones públicas y que se hayan tenido que cancelar.
  • Agilización del pago de las ayudas y subvenciones ya concedidas. Abreviación de los trámites para nuevas ayudas.
  • Convocatoria urgente de las Subvenciones para la Creación Literaria correspondientes a 2020, incorporando esta vez la modalidad de traducción, olvidada en la convocatoria de 2019.
  • Consideración del estado de cosas en las nuevas convocatorias con criterios que se adapten al actual periodo de inactividad en el sector editorial.
  1. Medidas laborales y relacionadas con la Seguridad Social
  • Retomar la reforma de los epígrafes de Hacienda y de la Seguridad Social: si la LPI nos reconoce a los traductores como autores, las leyes laborales deben reconocernos como tal. En la actualidad estamos en el epígrafe 7430.- Actividades de traducción e interpretación (dentro de M.- ACTIVIDADES PROFESIONALES, CIENTÍFICAS Y TÉCNICAS), mientras que los escritores y autores de teatro están en 9003.- Creación artística y literaria (dentro de R.- ACTIVIDADES ARTÍSTICAS, RECREATIVAS Y DE ENTRETENIMIENTO).
  • Dadas las peculiaridades de facturación de los traductores de libros (sin regularidad mensual), proponemos una modificación del RDL 8/2020 y de la redacción dada en el RDL 11/2020 para que podamos acogernos a medidas similares a las de los trabajadores del grupo CNAE 2009 R (actividades 9001, 9002, 9003 y 9004) y, además, que la reducción del 75 % de los ingresos no se estime tomando como referencia la media de los últimos seis meses, sino de los últimos tres años, como ocurre en el Reino Unido, Noruega y Suecia.
  • Reducción de las cuotas de la Seguridad Social mientras duren las consecuencias económicas del estado de alarma. Aplazamiento sin recargo de los pagos de las cuotas mientras se tramita la solicitud de cese de actividad por descenso de facturación.
  • Establecimiento de un fondo de ayuda como dotación extraordinaria a las sociedades de gestión de derechos de propiedad intelectual para que estas puedan atender situaciones de necesidad de autores y traductores en situación de vulnerabilidad (el uso de nuestras obras ha disminuido en los espacios públicos, pero ha aumentado significativamente en línea).
  • Establecimiento de una mesa sectorial, con arbitraje de la DGL, para el control y mediación en caso de impagos o de retrasos en los pagos de contratos suscritos antes de la declaración del estado de alarma.
  • Establecimiento de una interlocución estructurada entre Gobierno, Parlamento y entidades del sector para afrontar, cuando cese el estado de alarma, tanto la reactivación del sector editorial a corto plazo como el desarrollo del Estatuto del Artista, y garantizar así que ningún trabajador del sector quede desamparado ante la ley.
  1. Ayudas a librerías, editoriales, imprentas y distribuidoras
  • Partidas presupuestarias para proporcionar liquidez a las librerías, por ejemplo, mediante la adquisición por parte del Estado de fondos para bibliotecas, como ya se hace en muchos países latinoamericanos, favoreciendo a las más vulnerables.
  • Acceso a líneas de crédito oficial o de fondos para cubrir la ausencia de ingresos, lucro cesante o el pago de préstamos.
  • Decretar una demora de los pagos de los préstamos.
  • Bonificación fiscal a empresas, profesionales y entidades del sector editorial, 
como reducción del IBI y su no devengo para los locales/sedes de empresas vinculadas al sector editorial y que se han visto obligadas a parar su actividad durante el estado de alarma.
  • Las ayudas a las editoriales estarán condicionadas a su compromiso de no empeorar las condiciones laborales de sus colaboradores.
  1. Otras medidas
  • Campañas coordinadas de Cultura, Educación y CEDRO para el fomento de la lectura y la lucha contra la piratería digital.
  • Creación de un código de buenas prácticas que guíe la actuación de las administraciones públicas con respecto al sector editorial (subvenciones autonómicas y locales).

 

ACE TRADUCTORES
 Sección Autónoma de Traductores de Libros de la Asociación Colegial de Escritores